BARINAS Y SUS
PERSPECTIVAS HACIA EL SIGLO XXI
PALABRAS DEL
GOBERNADOR
GEHARD CARTAY
RAMIREZ
AL PRESENTAR EL
PLAN TRIENAL DE DESARROLLO DEL ESTADO BARINAS (1995-1997)
(Barinas,
08 de noviembre de 1995)
Estamos presentando en este acto el Plan Trienal de Desarrollo del Estado
Barinas 1995-1997, que nuestro gobierno y sus equipos técnicos han elaborado
en un esfuerzo concienzudo para fijar los grandes objetivos de la región.
Tres son los objetivos que perseguimos al dar
a conocer a la opinión pública barinesa un documento como este, que no vacilamos
en calificar como histórico, más allá de que en el pasado su elaboración algunas
veces se cumplió como un simple ritual administrativo, y no como una oportunidad
excepcional para fijar nuestras grandes metas de progreso y desarrollo.
Por eso hemos querido también que el Plan Trienal de Desarrollo del Estado
Barinas 1995-1997 sea en esta ocasión presentado en una edición de lujo que
con el título Barinas, tierra exuberante
y promisoria / Perspectivas hacia el siglo XXI, pueda llegar a la opinión pública
y cumplir así con nuestra aspiración de que sea conocido por la mayor cantidad posible
de barineses.
De allí que su publicación como tal cumple ciertamente
tres objetivos muy importantes.
En primer lugar, contiene -como lo acabo de
señalar- la presentación del Plan Trienal de Desarrollo del estado Barinas,
imperativo legal a que está obligado el Gobierno Regional, mediante el cual se
fijan las metas y propósitos para los próximos tres años de ejercicio
gubernamental.
En segundo lugar, este libro permitirá comunicarle
a la comunidad barinesa los grandes parámetros del desarrollo integral de
nuestra entidad federal, con miras hacia el próximo siglo. En este sentido, se
trata de un estupendo instrumento para nuestros líderes de hoy y de mañana, por
cuanto diagnostica nuestra realidad y al mismo tiempo formula proyectos y
planes a fin de transformarla en beneficio de todos los barineses.
Y en tercer lugar, y no por ello menos
importante, sino todo lo contrario, este Plan Trienal de Desarrollo de estado
Barinas es fundamentalmente un compromiso con el porvenir de nuestra región y
de su gente. De tal manera que, junto a ese compromiso tan fundamental -yo diría también
que histórico por mil razones-, se proponen programas factibles de
ejecutar y también, desde luego, un instrumento para la toma de las decisiones
a que haya lugar.
Debo insistir en que el Plan Trienal de Desarrollo del Estado Barinas 1995-1997 que hoy presentamos en este libro, muy bien editado por
lo demás, reúne el concurso de mucha gente que vive, siente y conoce a Barinas.
Decenas de profesionales jóvenes, sondeos de opinión recogidos en el seno de
las comunidades y entre los más diversos sectores políticos, sociales,
económicos, deportivos, culturales, universitarios, militares, religiosos,
etc., etcétera, nos garantizan la seguridad de interpretar una visión realista,
unida al sentimiento de los habitantes de nuestra región. A todos ellos,
verdaderos gestores del Plan que hoy presentamos, expresamos nuestra gratitud y
nuestro compromiso.
Junto a estos criterios de participación
efectiva, que expresan una vez más nuestra convicción como gobernantes que
realizamos una gestión pluralista -respetuosa de todas las opiniones y
posiciones-, se suman algunas definiciones que consideramos intransables. Así,
todo el diseño del Plan Trienal está priorizado por un acento en lo social, que
se inscribe en una irrenunciable solidaridad con los más débiles, dicho sea
esto sin hacer concesiones a la demagogia populista, tan del gusto de quienes
nos antecedieron.
Esa prioridad no descuida -no podría hacerlo
por razones obvias- el desarrollo económico que con realismo aborda las áreas
de probada potencialidad y de arraigo del barinés, ni soslaya las necesidades
del equipamiento e integración territorial, ni deja de lado la tan necesaria
preservación de ambiente, ni menos renuncia a la necesidad de modernizar la
gestión gubernamental en la dirección de hacerla más eficiente y útil a la
gente.
La cuestión social -insisto-, rango
preferente de nuestro gobierno, no es una decisión subalterna o vinculada a
irresponsabilidades de corte demagógico. Eso sería perseverar en prácticas
clientelares que dañan la dignidad de nuestro pueblo. Por eso mismo, las
políticas de carácter social: salud, alimentación, educación, atención al niño,
protección del menor, transporte público, vivienda, deporte, vialidad,
financiamiento a pequeños y medianos empresarios y productores agropecuarios y
campesinos, así como la mejora de los servicios públicos y de la calidad de
vida de los barineses, son todos programas exentos de cualquier intención
sectaria, que apuntan a la solución práctica de problemas urgentes y de
necesidades sentidas por quienes han nacido aquí o han decidido permanecer en
nuestra generosa y acogedora tierra.
El presente Plan Trienal de Desarrollo del estado Barinas 1995-1997 que, con visión futurista, presenta el Gobierno que
dirijo a la consideración de la Asamblea Legislativa -y, a través de ella, a
toda la comunidad barinesa- posee un diseño distinto a los tradicionales planes
de este tipo. La intención no es ser innovadores para establecer diferencias de
significación menor: por el contrario, valorando el destino de muchos planes
anteriores, ceñidos a cartabones no muy funcionales ni pertinentes, hemos
preferido elaborar un Plan Trienal de Desarrollo que, al alcance de todos,
logre igualmente generar compromiso en todos los niveles de decisión y sea
accesible a todos los habitantes del estado.
Sea este que hoy presentamos, como alguien
decía, el Libro de Barinas, mediante
el cual todos conozcamos el camino y sepamos que es posible devolverle a
nuestra querida región el esplendor de otras épocas, así como también señalarle
y hacer realidad nuevas metas de progreso y bienestar para mejorar la calidad
de vida de sus habitantes e impulsar el desarrollo definitivo de esta gran
región.
Muchas gracias a todos (Aplausos).