EL CAMBIO EN LA EDUCACIÓN BARINESA
PROMESAS Y REALIDADES (VI)
(1992-1996)
UN HECHO
HISTÓRICO: LA OBTENCIÓN DE RECURSOS PARA FORMAR 4000 DOCENTES Y REPARAR 300
ESCUELAS EN BARINAS
TOMADO DEL
SEGUNDO MENSAJE DEL GOBERNADOR DE BARINAS
GEHARD CARTAY RAMÍREZ
A LA ASAMBLEA LEGISLATIVA
(Barinas, 28 de marzo de 1995)
En 1994, la Dirección de
Educación del gobierno que dirijo continuó la ejecución de sus planes de
mejoramiento del nivel educativo regional, meta que nos hemos trazado desde el
primer día, a pesar de los numerosos obstáculos que se han presentado,
consecuencia inevitable de la cultura sindicalera y partidista que ha
caracterizado a algunos directivos gremiales del sector, aunado a los intereses
de grupos que se empeñan en mantener ciertos niveles de empirismo, atraso y
anacronismo en el campo de la docencia escolar.
Nos hemos mantenido firmes
ante tales despropósitos y, paralelamente a la meta de optimizar la calidad de
la enseñanza, también hemos atendido las reivindicaciones del sector
magisterial. Se han mejorado la remuneración de los docentes regionales, así
como sus primas y bonos en un 30 por ciento (30 %) y se ha dado cumplimiento a
las demandas contractuales. Igualmente, se ha procedido a la dotación de
equipos y materiales de enseñanza e incrementando el número de becas otorgadas
por el Gobierno Regional.
Un hecho histórico que debo
destacar con orgullo y satisfacción como gobernante lo constituye la puesta en
marcha, durante el Año de la Cuenta,
de los Programas de Modernización
y Fortalecimiento de la Educación Básica y de Mejoramiento de la Calidad de la
Educación Básica en el Estado Barinas -acerca de los cuales les informé en mi
Mensaje del año anterior-, suscrito el pasado siete de diciembre de 1994 entre
la Gobernación del Estado Barinas, el Ministerio de Educación y el Banco
Interamericano de Desarrollo (BID) el pasado siete de diciembre de 1994, por un
monto inicial de tres mil quinientos millones de bolívares (Bs.
3.500.000,00).
Para el cabal cumplimiento de
tan ambiciosos programas, y dada la magnitud de los planes, proyectos y
recursos a manejar, decreté el 12 de
septiembre de 1994 (Decreto No. 284) la creación de la Unidad Ejecutora Regional
de Programas Educativos (UCER), dependiente directamente del gobernador, la
cual tiene bajo su responsabilidad la ejecución de tales programas y sus
importantes objetivos propuestos, tales como la recuperación, rehabilitación y
dotación de la actual red de escuelas básicas con que cuenta la región.
Ambos Programas persiguen
introducir cambios profundos tanto en la calidad de la educación como en el
mejoramiento de las condiciones físicas y ambientales donde aquella se imparte,
aspectos que habían sido abandonados lamentablemente por décadas. Así, el
primer Programa nos permitirá elevar el nivel de aprendizaje de los
estudiantes, reducir la deserción y repitencia crónicas e incrementar la
calidad de la formación del docente, mientras que el segundo Programa mejorará
y ampliará las instalaciones físicas de un importante número de escuelas
básicas dependientes de la Gobernación, así como su respectiva dotación de
bibliotecas, materiales didácticos y preparación del personal que las atenderá.
El primer Programa, financiado
por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), persigue como objetivo mejorar
la calidad de nuestra educación, reduciendo las tasas de deserción y
repitencia, apoyando el proceso de descentralización del sector. Así,
entrenaremos 4.000 docentes del Primero al Sexto grado, con la posterior
entrega de 800 programas y guías para docentes de la Primera y Segunda Etapa de
Educación Básica.
El segundo Programa, también
financiado por el BID, nos permitirá en los próximos cinco años reparar
doscientas ochenta (280) escuelas regionales en todo el Estado Barinas,
dotándolas, además, del mobiliario mínimo exigido para ambientes escolares.
Igualmente, esas 280 escuelas reparadas y mejoradas serán equipadas con sus
respectivas bibliotecas y dotadas de materiales de texto y didácticos en
general. Este programa comprende también la capacitación de 280 bibliotecarios
escolares, especialmente preparados al respecto.
Ambos Programas, insisto, son
dos de los más importantes logros de mi gobierno en materia educativa y tienen
una indiscutible proyección histórica en función de la educación de las
venideras generaciones de los niños barineses.
Igualmente, deseo destacar el
Convenio de Colaboración que mi gobierno firmó con el Ministerio de Educación
el 30 de mayo de 1994, que nos permitió elaborar la primera Evaluación de las
Capacidades de Gestión en las Instancias del Sector Educativo, tanto nacional
como estadal, a los fines de adelantar eficientemente el Plan de Mejoramiento
de la Calidad de la Educación Básica en el Estado Barinas.
En el área técnica docente y
administrativa y social la tarea ha sido realmente significativa. En 1994 se
atendió una matrícula que ascendió por niveles y modalidades a sesenta y seis
mil doscientos cincuenta y cuatro (66.254) estudiantes en todo el Estado
Barinas. A parte de las actividades rutinarias, la Dirección de Educación,
siguiendo mis instrucciones de mejorar la situación salarial de todo el
personal al servicio del Gobierno Regional, durante el Año de la Cuenta tramitó
y ordenó la incorporación de primas por profesionalización, hogar e hijos y el
pago por concepto de suplencias, sueldos pendientes y escalafón. Igualmente, se
atendieron los planteamientos de los gremios y docentes sobre los Procesos de
Clasificación, conforme a lo establecido en el IV Contrato Colectivo, suscrito
por mi gobierno. También se brindó orientación y asistencia psicológica en
doscientos ochenta y un (281) casos registrados en las Escuelas Básicas
Estadales y Nacionales. Se realizaron diez (10) Talleres de Crecimiento
Personal, dirigidos a docentes de escuelas Básicas seleccionadas al efecto. Se
realizó el Primer Consejo Regional de Directores de Escuelas Básicas y Rurales.
Se prestó asesoramiento a los Directivos de las Escuelas Básicas Urbanas sobre la
aplicación de los procedimientos relativos a las Directivas de las Sociedades
de Padres y Representantes, así como sobre la distribución de los ingresos de
los presupuestos-programas de los planteles. Se crearon dos (2) Centros de
Educación Básica de Adultos y se atendieron a doscientos ochenta (280)
instituciones con personal anexo de la Dirección de Educación del Estado.
Finalmente, se aprobaron
trescientas cincuenta y cinco (355) becas de Educación Básica, quinientas cinco
(505) becas para Educación Media y doscientos ochenta y nueve (289) becas para
Educación Superior, lo que suma un total de un mil ciento cuarenta y nueve
(1.149) becas, con cargo al presupuesto del Gobierno que dirijo.