viernes, 14 de diciembre de 2012

EN LOS 32 AÑOS DE COPEI

Mensaje del diputado GEHARD CARTAY RAMÍREZ, Secretario General del Partido Social Cristiano Copei en el Estado Barinas, a través de la red regional de emisoras de radio.

(Barinas, 13 de Enero de 1978)

Barineses, barinesas:
El Partido Social Cristiano Copei cumple hoy treinta y dos años de fundado.
Desde aquel trece de Enero de 1946, cuando apenas éramos una minoría, a este trece de enero de 1978 que nos encuentra como partido mayoritario a las puertas del retorno al poder, los socialcristianos hemos escrito las mejores páginas de la más reciente historia venezolana.
No ha habido acto de engrandecimiento nacional que no haya contado con nuestro aporte. No ha habido, tampoco, injusticia en la Patria que no haya tenido nuestro rechazo. En cada circunstancia y en todo momento, Copei ha estado al lado del pueblo, porque no otro puede ser el destino de un Partido nacido para transformar la injusta realidad que nos rodea, y realizar los cambios profundos que le proporcionen a los hombres y mujeres de esta tierra el bienestar, la justicia y la felicidad que le niegan hoy quienes desde el gobierno los traicionan y marginan.
Estos 32 años nos encuentran cumpliendo con madurez y responsabilidad nuestro compromiso con Venezuela. Hemos sido y somos, tanto en gobierno como en oposición, alternativa vigilante de los mejores intereses del país. La reciente conducción del Presidente Rafael Caldera es recordada por los venezolanos con satisfacción y nostalgia. Bajo su gobierno ciertamente se realizó una obra fecunda con proyección hacia el porvenir. Gobernamos sin difamar a los antecesores, y sin invocar fallas del gobierno anterior para descargarnos de las responsabilidades derivadas de nuestras propias acciones u omisiones. No recurrimos a tales prácticas burdas y cobardes, tal como lo ha venido haciendo reiteradamente el gobierno de Carlos Andrés Pérez. El Presidente Caldera gobernó, en cambio, con sentido de pedagogía política. Se respetaron los derechos ciudadanos. Se propició y logró el regreso a la vida legal de aquellos que equivocadamente fomentaron la violencia guerrillera. Se gobernó en paz.
Copei desde el gobierno adelantó entonces programas de fomento y diversificación de la educación, así como planes agrícolas, industriales, de salud, de obras públicas, habitacionales y de otros órdenes, cuya proyección se reconoce a medida que transcurre el tiempo y se los compara con la incompetencia y el despilfarro que caracterizan a la actual gestión administrativa adeca.
En el caso de nuestro Estado Barinas, la administración encabezada por nuestro compañero Luciano Valero como gobernador entre 1969 y 1974, dejó huella profunda por la obra de hondo contenido social y humano cumplida durante el pasado quinquenio. Todos los pueblos de Barinas fueron atendidos y en cada uno de ellos está presente la gestión socialcristiana. Se implementaron entonces amplios programas educativos, sanitarios, agrarios, de promoción popular, de vialidad y de obras públicas, cuya contribución el desarrollo regional no han podido negar ni siquiera nuestros más enconados adversarios. Se administraron con honestidad y eficacia los recursos de que se dispuso y se proyectó a Barinas como posible polo agroindustrial dentro de la zona occidental del país. Hubo honestidad y decencia, en contraste con las corruptelas y peculados que hoy caracterizan la gestión del gobierno regional.
Vueltos a la trinchera de la oposición, el Copei de Barinas -como el de toda Venezuela- ha cumplido a cabalidad su papel de líder del pueblo opositor al gobierno adeco. Lo hicimos desde el principio, convencidos como estábamos de que un gobierno con tanto poder político y económico como el actual, podía caer fácilmente en el terreno del abuso de ese poder. Y los hechos de estos últimos cuatro años han venido a darnos la razón: el gobierno de Acción Democrática ha pretendido y pretende dominar hegemónicamente dentro de una escalada tendiente a silenciar a quienes disentimos de su política equivocada y dañina.
Pero nada ni nadie ha podido ni podrá silenciar nuestra voz ni desviarnos del camino trazado, que no es otro que el de ser portavoces de la angustia de los venezolanos. El pueblo está cansado ya de tantas promesas, incumplidas todas, de tantas expectativas fallidas. El pueblo está cansado ya de tantas mentiras del gobierno, de tantas burlas oficialistas a su creencia de que las cosas iban a mejorar ahora (Aplausos).
La historia no podrá perdonar al gobierno de AD por haber perdido una oportunidad histórica excepcional cuando asumió el poder. Entonces recibió un país pacificado, con amplias disponibilidades y recursos financieros que pudieron invertirse en el desarrollo integral de Venezuela. Estaban dadas todas las condiciones para una obra de gobierno realmente beneficiosa para todos.
Por desgracia nada de eso se logró. Desde el comienzo, el gobierno ha improvisado iniciando una loca carrera hacia el abismo. Se han despilfarrado en cuatro años más de 200 mil millones de bolívares, cifra superior a la manejada por Presidente alguno desde el catire José Antonio Páez hasta Rafael Caldera. No hay obra alguna, mientras que la gente siente que su situación económica ha empeorado aceleradamente. La administración adeca, la económicamente más rica en la historia del país, es la más pobre en sus resultados a favor del pueblo.
El país ha visto convertirse en engaño la oferta de la vida barata que tanto ofreció el actual Presidente y su partido. Por el contrario, los venezolanos —sobre todo los sectores de escasos recursos— han sentido el castigo del alza constante y desmesurada del costo de todos los artículos de la dieta familiar, del vestido y de la vivienda. Así mismo, el pueblo vive un tremendo estado de inseguridad personal que ha convertido a Barinas, de la pacífica y cordial ciudad que era, en una ciudad azotada por el hampa y la delincuencia, en donde asaltos y asesinatos aumentan de manera preocupante, sin que las autoridades hagan lo conducente para proteger a la familia barinesa.
El pueblo siente como a diario aumenta la ineficacia de los servicios públicos y la falta de voluntad del gobierno para mejorarlos. Las ciudades y los pueblos reclaman todos los días para que se mejoren los servicios de agua, energía eléctrica, aseo urbano, teléfonos, transporte, etc., cuando no es que se pide su creación pues aún hay muchas localidades que carecen de los más elementales servicios públicos.
Barinas ha sido, particularmente, uno de los Estados peor tratados por el gobierno actual. Huérfana de servicios públicos eficientes, como ya hemos dicho, con una crisis sanitaria galopante, en un insólito clima de inseguridad, Barinas no ha podido beneficiarse con la millonada de bolívares que conforman sus presupuestos de estos últimos cuatro años. El pueblo barinés se ha convertido en un convidado de piedra, mientras la demagogia adeca pretende esconder estas realidades recurriendo a sus viejas prácticas electoreras (Aplausos).
Allí están nuestros barrios, viviendo en las peores condiciones de habitabilidad. La educación marcha en acelerado retroceso. No hay empleos ni oportunidades de trabajo. Sus gentes viven en zozobra ante la falta de vigilancia policial. Sus calles están intransitables. La ciudad presenta un aspecto desolador que ni siquiera la farsa montada con motivo de su Cuatricentenario pudo mejorar, aunque fuera superficialmente.
A nivel rural, nuestros pueblos barineses agonizan abandonados y marginados de la acción oficial. No hay vías de penetración en buen estado, ni créditos ni asistencia técnica para los campesinos. La incapacidad del gobierno ha impedido que las aspiraciones del sector campesino puedan ser convertidas en realidad. La paralización de la Reforma Agraria ha creado una difícil situación en el campo, mientras los principales dirigentes campesinos adecos, olvidados de las promesas hechas, sólo se preocupan por mejorar su situación personal, al punto tal de ser hoy por hoy personajes reputados como empresarios de cuantiosos y mal habidos recursos económicos. Al mismo tiempo, las pequeños y medianos productores rurales elevan todos los días su rosario de quejas por la incompetencia del gobierno. Tanto en las ciudades como en el campo, el panorama no deja de ser sombrío y desolador.
Frente a toda esta situación, Copei surge hoy como la alternativa del pueblo venezolano para derrotar a este gobierno incompetente, demagogo y corrupto, culpable de la grave crisis que sufre el país. En este sentido, la candidatura nacional de Luis Herrera Campíns viene sumando las voluntades de todos aquellos venezolanos que aspiran una rectificación eficaz ante la avalancha de problemas creados por la actual gestión gubernamental de Acción Democrática. Hay una evidente voluntad de cambio, producto del desencanto popular frente al gobierno adeco, por una parte, y de la poderosa proyección de diálogo y unidad que tiene la candidatura de Luis Herrera, por la otra (Aplausos).
Al país entero le consta que Copei escogió su candidato presidencial de manera unitaria, sin traumas internos ni divisiones partidistas. Mientras el partido de gobierno vivió y vive una grave crisis a consecuencia de la lucha interna por la candidatura presidencial, los socialcristianos, en forma solidaria y cordial, escogimos como candidato a la Presidencia de la República al hombre que justamente el país exige y reclama. La candidatura de Luis Herrera no es, pues, la candidatura de un sector del partido, ni siquiera es la candidatura de Copei, sino que se ha convertido en la candidatura de la mayoría del pueblo venezolano que, en esta hora dramática, reclama un líder que can seriedad, sensibilidad y honestidad conduzca al país hacia el progreso y el bienestar de todos. En cambio, la derrotada y melancólica candidatura de AD es apenas la imposición de la voluntad del Caudillo del Partido, pero sin contar con el apoyo y la emoción de las bases populares adecas, las cuales miran hoy con simpatía la figura carismática de Luis Herrera (Aplausos).
El país, pues, ha hecho suya la candidatura de la Democracia Cristiana. Luis Herrera encuentra en todas partes un ambiente favorable. Hay una profunda simpatía por esta candidatura del diálogo, la amplitud y la comprensión. El pueblo sabe que Luis Herrera tendrá un estilo de gobernar que propenderá a la solución los pequeños y grandes problemas, sin exclusiones de ninguna naturaleza. “Lo que cuenta para nosotros —ha dicho nuestro candidato presidencial— es la persona y gobernar debe ser una manera patriótica de servirla y promoverla, estimular su emulación y alcanzar al ambiente de superación que permita la grandeza de los pueblos”.
Con Luis Herrera como Presidente no se va a repetir el engaño del actual gobierno; el olvido actual por la gente va a ser sustituido por una auténtica preocupación por su suerte, su destino y su porvenir. Vamos servir a todos mediante una acción firme de gobierno que se preocupará por resolver las necesidades de hoy sin descuidar las metas del porvenir. Con Luis Herrera como Presidente vamos a construir un país que consolide su democracia política mediante el fortalecimiento de su democracia económica, es decir, mediante la participación de todos en el trabajo creador y la creación y redistribución de la riqueza nacional.
A partir de 1978 un nuevo estilo de gobierno conducirá al país  hacia metas ambiciosas. Vamos a luchar por una verdadera democracia de participación, auténticamente humana y solidaria, que abra a todos la posibilidad del goce y disfrute de sus beneficios. La familia tendrá en Luis Herrera un gobernante decidido a protegerla y promoverla. Vamos a rescatar la significación verdadera de los Concejos Municipales, tan torpe y corruptamente dirigidas hoy por AD. Vamos a llevar adelante una política de fortalecimiento de la conciencia nacional para reafirmar nuestra propia identidad como Patria y Nación (Aplausos).
Con Luis Herrera como Presidente nuestra acción de gobierno procurará una mejora real de la calidad de vida, así como una mejor protección de nuestros recursos naturales. La niñez y la juventud tendrán prioridad en nuestros planes de gobierno, a fin de educarlas mejor y recrearlas sanamente. Promoveremos el desarrollo del proceso educativo basado en la idea de que la educación debe ser permanente para capacitar a todos. Vamos a prestar especial atención al fomento del deporte, al cual Luis Herrera concibe como medio eficaz para mejorar la formación y salud del venezolano. A estos fines, nuestro candidato se ha comprometido a mejorar el sistema nacional de salud y las condiciones tendientes a garantizar a todos el derecho a la salud y la atención médica.
Luis Herrera ha dicho que será un Presidente con preocupación centralizada en la construcción de amplios planes habitacionales que garanticen vivienda a los sectores más necesitados. Estamos concientes de que bajo este gobierno adeco se han deteriorado la mayoría a los servicios públicos. Justamente por ello Luis herrera como Presidente se ha comprometido a ampliar, mantener en buen estado y hacer funcionar eficientemente los servicios públicos.
Así mismo, entiende Luis Herrera que la cultura —bajo su gobierno— debe ser factor primordial para el desarrollo nacional y se ha comprometido a impulsar programas dirigidos a llevarla hasta los más amplios sectores populares, para los cuales la cultura ha sido siempre fruto prohibido.
En nuestro Estado, fundamentalmente agropecuario, el Gobierno de Luis Herrera Campíns deberá dedicar especial atención a los campesinos y a los pequeños y medianos productores rurales. A todos, tan duramente golpeados por el gobierno actual, nuestro abanderado presidencial ha ofrecido la noción del Estado Promotor, a fin de estimular  a quienes con sacrificio y dificultades empeñan su esfuerzo en el campo venezolano (Aplausos).
No se nos escapa en esta hora trascendente el aporte rendido al país por los venezolanos nacidos en otras tierras. Sabemos de la capacidad de sacrificio y trabajo de quienes venidos de otras Patrias han hecho suya la del Padre Libertador Simón Bolívar. Ellos saben que nunca los hemos utilizado mediante maniobras electoreras, sino que, por el contrario, nuestra ideología universal y humanista nos ha permitido valorarlos en la misma medida en que han contribuido con nosotros a luchar por un destino mejor.
Todas estas aspiraciones venezolanas, y muchas más, vamos a llevarlas adelante, Dios mediante, con Luis Herrera Campíns como Presidente. Como el mismo lo ha dicho “vamos a hacer un gobierno que escuche. Que tome en cuenta a la gente. Que en lugar de hablar tanto prefiera el trabajo. Un gobierno que ejerza la autoridad sin abusos ni arbitrariedades. Un gobierno de amplitud. Un gobierno de todos y para todos. Un gobierno que gobierne.” (Aplausos).
En estos treinta y dos años del Partido Social Cristiano Copei, hacemos propicia la ocasión para convocar a los barineses, sin excepción, a todos los que habitan con nosotros en este gran estado, para luchar juntos por Venezuela y nuestra región. Invitamos a todos, a obreros, campesinos, trabajadores, profesionales, amas de casa, deportistas, intelectuales, artistas, estudiantes; hombres y mujeres de buena voluntad, a acompañarnos en esta cruzada de amplitud y solidaridad venezolanas que encabeza Luis Herrera Campíns, para que todos unidos podamos construir una Venezuela mejor.
Muchas gracias (Aplausos)